Los detalles son la clave
Debo agradecer a mi familia el entregarme esta gran lección desde pequeña, y de esa forma poder hacer de mi vida algo enormemente valioso, entretenido y por sobre todo muy feliz.
Hay quienes juntan cantidades de cosas, de acciones, de lecciones, de todo. Las juntan y amontonan como si fueran una colección de artículos que no se tocan. Se esmeran en dejarlas en los envases originales, como si esta especie de "culto" trajera consigo alguna extraña propiedad de brindarles un tiempo para disfrutarlas en otra vida. Una estupidez.
Se nos entrega la vida como se entrega un juguete a un niño, para que se disfrute a concho, para que nos divierta y nos llene de felicidad y dicha. Mantenernos alejados de esas bondades y privarnos de disfrutarlas es atentar contra las buenas intenciones que vienen implícitas en este gran regalo.
La felicidad no llega como la lotería, no hay que sacar o comprar un numero a algún distribuidor, no hay que esperar un sorteo, ni averiguar si nos toco premio en algún diario. La vida es inmensamente simple, somos nosotros los que intentamos burocratizarla en nuestro simiesco afán de ser "diferentes" y complicamos todo. Lo que es aun peor, la sociedad entera es crédula, al borde de la imbecilidad, se cree todo lo que los medios le cuentan y lo instaura y entrega como "conocimiento" real y probado a sus hijos...que desdicha, que atrocidad. Dios me libre de perturbar la libertad de mis hijos y su derecho a ser felices.
La felicidad se nos entrega en los detalles, cada día, cientos de veces. Despertar vivo cada mañana es una oportunidad de ser mas feliz que el día anterior. No somos complejos, reconozco con humildad mi expirabilidad y vivo riendo.
¿Para que atar mis alas para que otros que no se atreven a volar sean felices?. Lo siento, si se dan tiempo les puedo enseñar a volar, si no se atreven me verán partir tras un abrazo. Aborrezco la monotonía, hace años enterré el aburrimiento, tengo bien abiertos los ojos para maravillarme de todo aun cuando ya lo haya visto, siempre hay algo nuevo, siempre se puede dar un angulo distinto. Cada vez me doy tiempo para aprender y maravillarme de lo obvio, descubro, investigo, me asombro.
Soy feliz, inmensamente feliz. Lamento no ser lo suficientemente empática para entender a quienes no lo son, pero siento que me ha tocado vivir en el paraíso, siento que cada persona que he conocido me ha entregado algo valioso aun mostrándome su lado más obscuro he podido ver algo de luz en ello. Cada paso que doy me ayuda a dar el siguiente. Sigo pisando firme y confiada, no temo al futuro, no temo a la muerte, no temo a perder porque cada vez que he tenido sentimientos cercanos a la perdida la vida me regala el doble.
Ademas cuando naci venia conmigo en el empaque dos filas de dientes bien grandotes para reirme con fuerzas y un par de brazos bien largos para dar enoooormes abrazos.
Sean felices, dejen de perder el tiempo en tonteras sin sentido!