Intrigas sociales

  • By Claudia
  • 2010-06-05
  • 4 min read

Desde siempre he sabido que el mundo es como mis ojos me permiten percibirlo. No tengo la certeza ni la claridad como para aseverar que la realidad es para todos igual, ya que todos la percibimos de diferente forma. Toda esta mezcolanza de sensaciones y conclusiones de realidad varian de la realidad mas cercana que nos envuelve.

No es ninguna novedad. Estoy segura que mas de alguien "ya lo había leído", pero es increíble darse cuenta de que a pesar de ser un evento probado y documentado nos cueste tanto vivir con esa conciencia de certeza.

Lo que para mi es amarillo tal vez para otro sea azul, pero acordamos que como la mayoría le dice amarillo...pues que amarillo sea. Yo estoy convencida de seguir viéndolo azul, pero no peleo esa opcion, no soy fans de perder el tiempo en banalidades, pero el resto intuye esta conducta en mi. Prefiero ser tildada de "edzpezial", "exótica", "excéntrica" lo encuentro más entretenido, digamos que aporto diversidad :mrgreen: a pesar de que la tolerancia no es una faceta muy difundida en este pais, prefiero correr el riesgo.

Hay algunas situaciones que son algo mas complejas que definir un color y que no he podido responder por ser ajenas a mi ventana mental y fisica. La mayor parte de ellas se relaciona al entorno de la sexualidad, les dejare algunas como para que vayan entendiendo.

  • Limites entre sensual y erótico, tanto para el hombre como para la mujer. Esto no solo condicionado o limitado al ámbito de la pura genitalidad, sino relaciones sociales normales y sanas. Incluso una conversación puede tener matices, por ejemplo, es muy diferente decirle a un hombre "¿Empezó a hacer calor o eres solo tu dentro de esa camisa que te queda maravillosa?" a acercarse sobre su hombro y decirle por detrás de su oreja casi susurrando "te quitas tu la camisa o te la quito yo?.

  • Diferenciación entre sensibilidad y mamonería, también en ambos sexos. Es verdad que genera gestos de cariño y aprecio que te demuestren cariño, pero donde esta el limite entre lo prudente y el hastío. Es agradable, por ejemplo, coincidir en la vida con un caballero, que se comporte como tal, pero que haya dejado atrás el machismo propio de época de armaduras y cinturones de castidad. Ser caballeroso no debiera incluir, de ninguna forma, el sentido de propiedad. Esto no va solo dirigido a los hombres, conozco varios especímenes de mi género que se sienten con derechos sobre el otro, como si ser amables y cariñosas se debiera pagar con algo mas que aprecio y consideración. La esclavitud se abolió hace años!.

  • Proactividad versus liberalismo. La sociedad favorece y premia el primero de estos conceptos en el ámbito laboral, pero lo castiga duramente en el ámbito relacional.¿Quien los entiende?. Por ejemplo, una persona creativa, sugerente de ideas, participativa, con afán investigador y eficiente en el trabajo puede ascender con mas rapidez que globo relleno con helio, pero estas mismas cualidades en una relación de pareja, son tildadas de exageradas, "exóticas", "putescas" y cuanto apelativo negativo exista. Claro, a menos que estés casado bajo las cinco mil leyes y compres la sabana con hoyito para tener sexo pffffffffffffffffffffffff. :evil: con todas esas reglas no se te levantan ni los pelos cuando hace frió pues!

A cosas como esas me refiero, no son tan complejas y se vienen a mi mente en ratos de ocio. Mientras desearía estar disfrutando de una buena película recostada en mi camita con scaldasonno en nivel 3, abrazada por quien me acepta loca de atar como soy y entiende cada una de estas cavilaciones vanas dispuesto a conversar sobre la inmortalidad del cangrejo hasta que se me cierren los ojos.